Imaginar a esta ciudad sin la silueta del majestuoso Puente Tampico resulta difícil para las nuevas generaciones. Sin embargo, la mayoría de los habitantes de la región vivieron otros tiempos, cuando el cruce del Río Pánuco se hacía por medio de los chalanes que atracaban en El Paso del Humo y El 106 después de una gran espera, ya que éstos no se daban abasto por el gran tráfico de carros y camiones que por ahí transitaban.
Ante la necesidad de mejorar esta situación que frenaba el progreso de una amplia región, siendo presidente de la república el Lic. Gustavo Díaz Ordaz, nació la inquietud de construir un puente sobre el Río Pánuco, apoyando ésta obra la modernización de las comunicaciones. Fué así que a mediados de 1967, siendo titular de la Secretaría de Obras Públicas el Ing. Gilberto Valenzuela, envió en su representación al Sr. Fernando Heftye, Jefe del Depto. de Difusión de dicha dependencia, a fin de presentar los proyectos ante las autoridades estatales y municipales anunciando que el presupuesto para su construcción, estimado entre 800 y 900 millones de pesos, había sido aprobado y se encontraba en manos del Dr. Emilio Martínez Manautou, tamaulipeco que ejercía sus funciones como secretario de la presidencia del país. A pesar de todo lo anterior, transcurrieron los años sin que iniciara tan anhelado proyecto.
La construcción del Puente Tampico inició en diciembre de 1979 en el sexenio del presidente José López Portillo y fue inaugurado en el de Miguel De la Madrid Hurtado el 17 de octubre de 1988 con un costo final de 140 mil millones de pesos.
Es una portentosa y moderna obra, alarde de la ingeniería civil mexicana, construida por la empresa Ingenieros Civiles Asociados (ICA).
Comunica a los estados de Tamaulipas y Veracrúz por medio de los municipios de Tampico y Pueblo Viejo, respectivamente.
Se escogió el sitio para su construcción principalmente por sus accesos, no es la parte más angosta del río, pero sí la más indicada por la ayuda en infraestructura natural que representa el cerro de Andonegui, además de encontrarse en los límites de Tampico y Ciudad Madero y, por el lado de Veracruz, cerca del tramo carretero Tampico-Tuxpam.
Su longitud es de 1,543 metros y 18 metros de ancho, divididos en cuatro carriles y un camellón. En total cuenta con 21 pilas de sostén; 13 en el lado de Tamaulipas y el resto en Veracrúz. Su característica principal son los tirantes acerados en las pilas 13 y 14, sobre las que van pilones de una altura de 60 metros. La carretera tiene 55 metros de altura sobre el nivel del Río Pánuco y permite el paso de grandes buques hacia el puerto de Tampico ya que su claro central mide 360 metros. Sus dos torres alcanzan los 110 metros de altura. Además posee dos pasos peatonales y desde él se obtiene una vista extraordinaria del río Pánuco y de buena parte del sur de la Zona Metropolitana de Tampico.
El Puente Tampico está considerado el eslabón más importante del sistema de distribución de carga del Golfo de México.
Esta obra que refleja un esfuerzo notable de ingeniería mexicana ganó en 1988 el Premio Internacional Puente de Alcántara sobre 36 obras similares construidas en España y Portugal, pero la mejor recompensa a todos los que en ella intervinieron es sin lugar a dudas el agradecimiento de los habitantes de la región que se han visto beneficiados y la gran trascendencia que ha tenido para el comercio y el turismo.